 Ike, un huracán que arrastra vientos máximos de más de 215 kilómetros por hora, ha obligado a la evacuación de cientos de miles de cubanos de las zonas de riesgo en las provincias orientales, donde se espera que llegaría ayer en la noche, con sus fuertes vientos e intensas lluvias.
El Gobierno de La Habana ha calificado a Ike de "extremadamente peligroso".
El ciclón, de categoría 4 de un máximo de 5 en la escala Saffir-Simpson, pasó ayer sobre el archipiélago de Turcas y Caicos, en aguas del Mar Caribe, y según las primeras estimaciones de las autoridades, causó daños en el 80% de las casas.
El primer ministro de las islas, Michael Misick, ha informado de que el huracán ha pasado con toda su potencia por la isla Gran Turca y que centenares de viviendas han perdido sus techos.
Por el momento no hay cifras de heridos o muertos, pero ha anunciado que los equipos de rescate están tratando de alcanzar a la gente que está atrapada en sus viviendas para llevarlas a refugios.
Según la cadena CNN, Ike es el huracán más fuerte que ha pasado por el archipiélago desde Donna, que arrasó las islas en 1960.
Ike arrastra vientos de 215 kilómetros por hora, se mueve a 24 kilómetros por hora y se espera que pueda aumentar algo más su intensidad antes de tocar la parte oriental de Cuba, según el último boletín del Centro Nacional de Huracanes (CNH) de EEUU, emitido pocos minutos antes del cierre de esta edición. Tragedia
Más de 600 muertos se contaban en Haití este sábado, tras el paso de los poderosos huracanes Fay, Gustav y Hanna, y la ayuda internacional aumentaba mientras se cierne en la isla la amenaza por el peligroso Ike.
Los cascos azules ayudaron el sábado en Gonaives, a evacuar a miles de personas ante la amenaza de Ike, luego de que 650 mil fueran afectadas por las inundaciones de Fay, Gustav y Hanna, indicó un responsable de protección civil.
Según la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (Ocha), más de 500 personas perdieron la vida en Haití por el paso del huracán Hanna y el balance de víctimas aumenta "de hora en hora". Una semana antes, Gustav ya había dejado 77 muertos en este país, uno de los más pobres del planeta.
Unas 250 mil personas necesitan ayuda humanitaria, sobre el total de 350 mil habitantes de Gonaives, una ciudad del norte del país, la más afectada por los huracanes, subrayó una portavoz de la Ocha. Papa pide ayuda
Por su parte, el Papa Benedicto XVI dijo ayer que estaba orando por los residentes de Haití, que ha sido golpeada por tres tormentas sucesivas, y señaló que esperaba que la empobrecida nación caribeña reciba pronto toda la ayuda que necesita.
"Estoy rezando por las víctimas, que desafortunadamente son numerosas y por los que quedaron sin hogar", afirmó después de celebrar una misa masiva en la capital de la isla mediterránea de Cerdeña.
"Estoy cerca de toda la nación y espero que toda la ayuda necesaria llegue pronto", indicó. |
