Miles de peregrinos llegaron a Jerusalén para la celebración

MURO DE LOS LAMENTOS JERUSALEM FOTOGRAFIA DE WALTER EDUARDO RODRIGUEZ CAMPOS



Hoy se realiza el Vía Crucis, uno de los momentos más destacados de la Semana Santa. También el fin de semana se celebra la fiesta judía del Purim. Alerta máxima en Israel. Cerraron los pasos fronterizos. JERUSALEN. En la iglesia del Santo Sepulcro, Michel Sabbah se arrodilla ante el sitio de la sepultura de Jesús. REUTERS



JE­RU­SA­LEN.- Mi­les de pe­re­gri­nos cris­tia­nos lle­ga­dos des­de el ex­tran­je­ro par­ti­ci­pan a par­tir de ayer de las ce­le­bra­cio­nes de Se­ma­na San­ta en Je­ru­sa­lén, in­for­ma­ron fuen­tes ca­tó­li­cas de Tie­rra San­ta. Pe­se a la re­cien­te ola de vio­len­cia re­gis­tra­da en to­da la re­gión de Orien­te Me­dio, fuen­tes ecle­siás­ti­cas ase­gu­ra­ron que no se han pro­du­ci­do can­ce­la­cio­nes en los hos­pe­da­jes.
Sin em­bar­go, por es­tos días se ven por las ca­lles me­nos pe­re­gri­nos que el año pa­sa­do, en par­te por­que los cris­tia­nos or­to­do­xos grie­gos no ce­le­bran la Pas­cua has­ta el 27 de abril.
En Je­ru­sa­lén, uno de los mo­men­tos más des­ta­ca­dos de la Se­ma­na San­ta se pro­du­ci­rá hoy, cuan­do se rea­li­ce el Vía Cru­cis a lo lar­go de la Vía Do­lo­ro­sa, el ca­mi­no que su­pues­ta­men­te si­guió Je­sús car­gan­do con la cruz has­ta el lu­gar de su muer­te por cru­ci­fi­xión.

La des­pe­di­da
El do­min­go se ce­le­bra­rá la so­lem­ni­dad de la Re­su­rrec­ción en la Ba­sí­li­ca del San­to Se­pul­cro, cons­trui­da en el lu­gar en el que se­gún la tra­di­ción fue cru­ci­fi­ca­do y se­pul­ta­do el hi­jo de Dios. El pa­triar­ca la­ti­no de Je­ru­sa­lén, Mi­chel Sab­bah, pre­si­de por úl­ti­ma vez las ce­le­bra­cio­nes. El lí­der ca­tó­li­co de Tie­rra San­ta cum­plió ayer 75 años y al­can­zó con ello la edad de su ju­bi­la­ción. Su su­ce­sor en el car­go se­rá el jor­da­no de 65 años Fuad Twal.

Fies­ta de los judíos
Asi­mis­mo, en Is­rael se ce­le­bra es­te fin de se­ma­na tam­bién la fies­ta ju­día de dis­fra­ces del Pu­rim. Por te­mor a aten­ta­dos, el Ejér­ci­to ha ce­rra­do her­mé­ti­ca­men­te los te­rri­to­rios pa­les­ti­nos. Pa­ra acu­dir a Je­ru­sa­lén pa­ra las ce­le­bra­cio­nes de Se­ma­na San­ta, los cris­tia­nos pa­les­ti­nos ne­ce­si­tan un per­mi­so es­pe­cial.
La fies­ta del Pu­rim, pa­la­bra que sig­ni­fi­ca suer­te, es una de las más ale­gres del ca­len­da­rio ju­dío. Es­tá re­co­gi­da en el Li­bro bí­bli­co de Es­ter y en ella se con­me­mo­ra la sal­va­ción del pue­blo de su to­tal des­truc­ción, en la épo­ca en que los ju­díos ha­bi­ta­ban en Per­sia. La ce­le­bra­ción coin­ci­de con el fin del pe­río­do de 40 días de lu­to de Hez­bo­llah por su co­man­dan­te Imad Mugh­ni­yeh, quien mu­rió en un ata­que con co­che bom­ba en Si­ria el mes pa­sa­do. El gru­po li­ba­nés cul­pó a Is­rael de es­te he­cho, pe­ro Tel Aviv ne­gó to­da par­ti­ci­pa­ción en el ase­si­na­to.
Por otra par­te, Is­rael man­tie­ne una ten­sa si­tua­ción re­gio­nal a par­tir del con­flic­to con la or­ga­ni­za­ción is­lá­mi­ca pa­les­ti­na Ha­mas, que con­tro­la Fran­ja de Ga­za. Recientemente trascendió que se había iniciado un proceso de negociación entre ambos bandos, con el fin de llegar a un proceso de paz. (Reuter-DPA)