Lo afirmó el número dos de la Santa Sede, Tarcisio Bertone, durante una misa en Guantánamo. "El Papa desea que éste sea un período para que el pueblo cubano crezca unido y solidario gracias a gestos de pacificación", dijo el cardenal, de visita oficial en la isla.
SALUDO. El cardenal en la Plaza Pedro Agustín Pérez Pérez. (EFE)
Mientras la Asamblea Nacional de Cuba, designaba como sucesor de Fidel a su hermano Raúl Castro, en la ciudad cubana de Guantánmo el secretario de Estado del Vaticano, cardenal Tarcisio Bertone , instó hoy al pueblo de la isla a impulsar un período de reconciliación y pacificación, al hablar "en nombre del Papa".
"La Iglesia católica no dejará de ofrecer su ayuda en esta acción pacificadora, convirtiéndose en la casa de todos, en especial de pobres, enfermos y necesitados", afirmó en una homilía el segundo hombre en la jerarquía del Vaticano.
En el cuarto día de visita en Cuba, Bertone ofició una misa en la Plaza Pedro Agustín Pérez Pérez, a unos 1.100 kilómetros al este de La Habana, en ocasión del X aniversario de la creación de la Diócesis de Guantánamo-Baracoa.
Destacó que "el Papa desea que éste sea un período en el cual el pueblo cubano crezca unido y solidario gracias al diálogo paciente y perseverante, gracias a gestos de reconciliación y pacificación que comprendan a todos los sectores de la sociedad".
"Sólo el camino de la concordia y la comprensión curan los corazones y sanan definitivamente las heridas provocadas por las tensiones del pasado", añadió.
"Sean constructores de una sociedad más solidaria y justa, donde reine un sincero espíritu de auténtica fraternidad", exhortó el cardenal Bertone , en medio de una ovación, tras rendir nuevamente homenaje al fallecido papa Juan Pablo II, en ocasión del décimo aniversario de su histórico viaje a la mayor de Las Antillas.
Esta fue la tercera misa oficiada por Bertone desde que llegó a la isla el miércoles pasado. El purpurado regresó más tarde a La Habana, donde mañana se reunirá con el ministro de Relaciones Exteriores, Felipe Pérez Roque y, en caso de entrevistarse con el nuevo presidente, Raúl Castro, sería el primer funcionario de un Estado extranjero en saludarlo.
