SINGAPUR (Reuters) - El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, decidió que una bancarrota programada de General Motors Corp. es la mejor manera de reestructurar a la empresa para que se convierta en un fabricante competitivo de autos, reportó Bloomberg, que citó a personas cercanas al asunto.
Obama también está listo para dejar que Chrysler LLC quiebre y se venda en pedazos, si es que la automotriz no puede establecer una alianza con Fiat SpA, dijo Bloomberg, que citó a miembros del Congreso que no identificó y a otras dos personas que conocen las discusiones en el Gobierno.
Obama dio el lunes 60 días a GM para que presente mayores reducciones de costos y de deuda de las que ya había propuesto en un plan de viabilidad del mes pasado.
Sin embargo, una bancarrota "rápida y quirúrgica" es descrita en el Gobierno de Obama como una opción que parece inevitable, dijeron personas cercanas al asunto a Bloomberg.