Panamá.- Más de 400 personas tuvieron que abandonar sus viviendas al quedar inundadas por el desbordamientos de ríos y quebradas debido a las lluvias en poblados de la occidental provincia de Veraguas, informaron el miércoles las autoridades de vivienda.
El desbordamiento del río San Pablo en la localidad de Soná, a uno 300 kilómetros de la capital, "llevó el nivel del agua casi a que los techos de unas 84 casas", dijo a la radio RPC desde el área afectada el ministro de Vivienda Carlos Duboy.
Los afectados, unas 480 personas, fueron llevados a albergues temporales y también a casas de familiares. Mientras las autoridades evaluaban la reubicación de las viviendas afectas.
"Son áreas que se afectan constantemente y son vulnerables. Por eso hay ubicarlos en áreas más seguras", dijo el ministro.
Las lluvias, las crecidas de ríos y deslizamientos de tierra también afectaron viviendas y obstaculizaron tramos de carreteras en otras provincias occidentales como Bocas del Toro y Chiriquí a unos 450 kilómetros de la capital.
En tanto, en Mangarías, en la provincia de Coclé a 200 kilómetros de la capital unas 250 hectáreas de siembras de arroz fueron dañadas por el desbordamiento de los ríos Chico y Natá, reportó la prensa local.
El director del Sistema Nacional de Protección Civil Arturo Alvarado dijo que las lluvias que caen desde el lunes estaban relacionadas a la formación de la tormenta tropical Ida.
"Lo que ayer (martes) nosotros llamábamos un sistema de mal tiempo o una depresión, hoy oficialmente el Centro Nacional de Huracanes (en Miami) lo denomina depresión tropical, y más tarde tormenta tropical", dijo Araúz a la televisión.
Señaló que la tormenta se desplazaba hacia Nicaragua, "por lo tanto está abandonando costa panameñas" lo cual podría dejar una estela de nubosidad en las provincias de Chiriquí y Bocas del Toro.
Araúz dijo que hacia la tarde del miércoles en Soná había bajado el nivel de las aguas y algunas personas estaban regresando a sus residencias.
